martes, 24 de noviembre de 2009

De regresos frustrados


Regresar, anhelo y a la vez pérdida de posibilidades. Es común en todos los inmigrantes el deseo de regresar a su hogar, por más que uno llegue a sentirse cómodo en el país de acogida, nunca será como lo propio, lo que ha mamado desde su nacimiento y en ésto juegan en primer lugar los afectos.
Por ello, de alguna manera, el fracaso de los retornos a sus países de los inmigrantes en general.
No obstante leemos que, por ejemplo, en el caso de Rumania, se dice que en cinco años el 30 % volverá a su país.
Para avalar ésta idea, se ha efectuado una encuesta a 800 ciudadanos de ese país, con datos como que, por ejemplo, hay en España 730.000 y el 71% deseaban regresar. No se precisaba una encuesta para darse cuenta, lo que si puede variar por país, es el deseo básico de regresar.
No obstante sobre la cantidad de individuos, la suma de los testeados es bastante pobre estadísticamente.
Por otro lado, las condiciones económicas en Rumania, con un salario medio de 250 € (hay gente que me informa que es una cifra exajerada) , para quién se acostumbró a tener más (y a gastar más también), las cosas se complican, ya que se deberá tener en cuenta los lazos que se establecen entre conciudadanos y respecto a los naturales del lugar, como es lógico a efectos de la integración.



En el caso de Rumania, el 25% de sus habitantes en edad dre trabajar, han salido del país para buscar ocupacion, menudo expolio.
Frente a ésto el gobierno de ése país, implementa un plan a principìos del 2008, para el regreso
de sus emigrados.
Sobre ésto es interesante escuchar al Presidente de la Agencia Nacional de Empleo, en dos conceptos notables en sus contenidos:
En el primero dice “también los que están afuera contribuyen al desarrollo”, ¡Vaya!
en el segundo, no quiere oir hablar de retorno, “no somos Nicaragua, somos europeos”, con lo que el Sr. Silviu Bian, pone de manifiesto, no solo su soberbia, sino un concepto despectivo hacia una nación soberana, con gente como los europeos, que trabaja, estudia, ama y es más solidaria seguramente que él.


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