Biocombustibles, la energía del futuro

E l uso de biodiesel y bioetanol reduce las emisiones de gases contaminantes El fenómeno del cambio climático, y otros problemas ambientales derivados de los altos niveles de contaminación que emiten los países desarrollados, han despertado el interés por las energías renovables. Los vehículos de motor son el medio de trasporte que más contaminación provoca y por ello se están desarrollando nuevos combustibles que disminuyan sus emisiones de CO2, los biocarburantes.
Se trata de combustibles que se obtienen a partir de ciertos cultivos. Son una fuente de energía limpia y renovable y se presenta como la principal alternativa al petróleo, un recurso limitado y altamente contaminante. Su principal aplicación es como sustitutos o añadidos a la gasolina y.- al gasóleo manteniendo las prestaciones de éstos, pero reduciendo las emisiones de gases contaminantes. Una opción respetuosa con el medio ambiente, cuyo desarrollo aún se encuentra en una fase incipiente. El biodiesel y el bioetanol son los dos biocarburantes más importantes en España. El biodiesel se obtiene a partir de aceite virgen o a partir de aceites usados y puede utilizarse en motores diesel. Por su parte el bioetanol se elabora a partir de azúcar, almidón y fangos residuales y se puede utilizar como sustituto de la gasolina o mezclado con ésta. La Unión Europea es la principal productora mundial de biodiesel, alcanzando cerca de 6 toneladas en 2006, mientras que EE.UU y Brasil lideran la producción de bioetanol. Pero el uso de estos combustibles alternativos no está plenamente implantado, ya que aún existen algunas limitaciones para su generalización. A pesar de ello, el desarrollo de los combustibles respetuosos con el medio ambiente es una necesidad de la que distintos organismos ya se han hecho eco. Así, la Comisión Europea ha elaborado distintos planes para aumentar la producción de biocombustible, subvencionando las plantaciones energéticas. Y ha fijado un mínimo obligatorio del 10% de uso de biocarburantes para 2020. Otra iniciativa relevante es el acuerdo al que han llegado el Ministerio de Agricultura Pesca y Alimentación y el sector agrario sobre el uso de girasol y colza para la elaboración de biodiésel en el marco de la Mesa de Biocarburantes, celebrada el pasado mes de febrero. La clave en España se encuentra en el aumento de la superficie de cultivos energéticos, ya que estos son la materia prima de los biocombustibles. Con el fin de alcanzar los objetivos del Plan de Energías Renovables 2005-2010 (PER), que sitúa a los biocarburantes en el 5,83% del mercado de los carburantes en 2010. En definitiva, los combustibles alternativos, como el biodiésel y el bioetanol, son una opción de futuro interesante debido a sus importantes ventajas medioambientales. Por lo tanto, parece una apuesta segura que debe superar las barreras que el choque de intereses impone a su desarrollo definitivo.
La última, aquellos que se oponen al desarrollo de estos biocarburantes(las petroleras, que quieren destruir nuestro mundo, como si fuera exclusivamente de ellos), nos dicen ahora que el precio de los cereales(o sea pan, alimentos para ganado, etc.), aumenta debido a que se destina a éstos usos. Qué más se les ha de ocurrir...